domingo, 1 de noviembre de 2020

PANDA DE HIPÓCRITAS

Últimamente no sé si es que tengo un problema o el problema lo tiene el mundo.

Me gusta pensar que es el mundo quien lo tiene y no yo.


Me fijo en la actitud de la gente, lo que dicen y como actúan con respecto a lo que dicen.

 

Hay mucha gente que dice querer un amor bueno y sin embargo viven inmersas en una relación toxica de la que no quieren salir y pintan de bonita, y siguen defendiendo un amor bueno, puro y sincero...

 

Hay amigas que dicen que quieren que te pase todo lo mejor, pero si esto ocurre la envide les corroe, intentan ponerle pegas y sin embargo siguen pensando y diciendo que se alegran por ti.

 

Esos padres que quieren lo mejor para sus hijos y cuando estos le dicen que es/son homosexual, tienen que aceptarlo en lugar de alegrarse por su hijo, por saber que quiere o a quien quiere querer en la vida.

 

Creo que estamos corrompidos por dentro y no sabemos disfrutar de la gente que nos rodea, de las cosas buenas que ocurren a nuestro alrededor y que solo sabemos destruir, cuando deberíamos aprender a construir.

 

Dime que miento, que no ocurren esas cosas, que no hay personas que viven una vida llena de falsedad porque tienen que aparentar en el mundo, dime que no hay miles de parejas que aparentan estar bien por el que dirán pero en casa no se dirigen la palabra, dime que no hay amistades que dicen ser las mejores e inseparables, pero acaban siendo personas pasajeras en la vida porque aparecen otras nuevas. Dime que en el mundo no hay personas que se sienten de usar y tirar porque hay gente que les hizo eso cuando en verdad lo único que querían era verte feliz incluso por encima de su felicidad....

 

 

Somos tan hipócritas, que por defender todas esas cosas que no tienen ni pie ni cabeza, estamos perdiéndonos momentos de nuestra vida y con gente que realmente vale la pena. Ojalá algún día aprendamos a construir y progresar.


lunes, 27 de abril de 2020

UN MUNDO

Estamos viviendo en unos tiempos en los que ya nada importa.
No se valoran a las personas que tenemos cerca cuando más las necesitamos.
El amor y el respeto ha sido sustituido, ahora todo es sexo y dinero.
Te alegras de que les vaya bien a tus amigos hasta que les va mejor que a ti.
Nuestra autoestima ya no depende de nosotros, si no mg y comentarios que recibimos en las redes.
Comentarios donde te dicen mil una cosa bonitas y no se creen, pero si se dice una sola cosa "mala" te hunden.

Estamos viviendo en unos tiempos donde todo nos molesta, todo son quejas, pero no cambiamos nada.
Donde exigimos libreta de expresión, pero si opinan distinto a nosotros, le atacamos y no se respeta su opinión.

En este mundo ahora manda el egoísmo y la hipocresía.
Un lugar donde nos da miedo mostrar quien realmente somos por miedo a ser juzgados.
Vivimos donde cada vez se fuma, se bebe y se tienen relaciones sexuales cada vez más jóvenes solo por encajar.

Nos hemos olvidado de quienes somos para centrarnos en lo que los demás quieren que seamos.

Vivimos donde el popular es el guapo y nos burlamos del inteligente.

Solo sabemos compararnos con los demás, parecemos los más felices en redes sociales y cuando los demás no pueden vernos solo lloramos, mostramos lo que queremos que los demás vean.

Estamos viviendo donde el cuerpo de la mujer esta sexualizado y aspiramos a tener un físico perfecto y nos olvidamos de cultivar nuestra mente.

Nos olvidamos de las cosas que queremos hacer, las que nos gustan de verdad por miedo a lo que opinen de nuestros gustos por lo que puedan opinar los demás.

Donde se normaliza las agresiones, el acoso, el maltrato y las violaciones.
Donde hacemos a la víctima culpable y al culpable lo victimizamos.

Un mundo donde TODO se arregla con dinero TODO, sin importar el daño, las consecuencias y las acciones que haya causado.

En este mundo el físico está sobrevalorado, nadie se atreve a conócete de verdad y saber que esconde cada persona en su interior.

Un mundo donde aspiramos a lo que no podemos ser, rodeados de prejuicios y estereotipos que negamos, un mundo donde nos olvidamos de lo que realmente nos hace felices por seguir lo que los demás creen que nos debería hacer felices.

Y yo me pregunto una cosa, ¿por qué?

¿No sería mejor cambiar todo esto?
Nadie se merece esconder el amor en el armario porque los demás no lo vean bien, con lo bonito que es el amor.
Nadie se merece sentirse inferior o insignificante por que los demás no sepan valorar lo valioso que es.
Nadie se merece aparentar ser quien no es, porque los demás no les gusta lo que es.
Nadie debería dejar de ser quien es por los demás, porque los demás no son nadie para decirte a quien debes querer, que te puede gustar o que puedes ser, porque en esta vida nadie es más que nadie y mucho menos nadie es quien para juzgar a los demás. Dejemos de tener miedo a lo diferente y lo que nos hace especiales.

VOLVAMOS A CAMBIAR EL MUNDO, HAGAMOS DE ES UN MUNDO MEJOR

miércoles, 25 de marzo de 2020

Tras la cuarentena



Ahora mismo, nos encontramos en una cuarentena, una cuarentena que va a hacer historia, pero que en nosotros puede crear un gran cambio.
Puede crear un gran cambio porque cuando todo esto pase, que pasara, volveremos a vivir cosas por primera vez, pero esta vez creo que lo valoraremos y viviremos con mayor intensidad.
Será la magia de las primeras vece, cuando regresen los cafés en el bar, las charlas en el parque con un simple paquete de pipas, las fotos apretados para salir todos, el primer abrazo, la primera cerveza con los amigos, las primeras vacaciones… vamos a valorar de nuevo todo lo importante y que por el hecho de tenerlo ahí a diario, no valorábamos y ahora echamos de menos.
Pensaremos en cuando todo sea un recuerdo pero la normalidad nos parecerá un regalo inesperado y hermoso. Ahora vamos a amar todo lo que hasta ahora nos pareció inútil. Cada segundo será valioso. Las quedadas con los amigos, ver el atardecer, los brindis, las risas, volver a reir juntos.
Hasta entonces, solo nos queda esperar, pero nos veremos pronto.

@Bi_twitera

martes, 17 de marzo de 2020

si puedes crearlos...




Creo que todos en algún momento hemos sentido ese nudo que aprieta, que ahoga, que quiere que grites, que sueltes todo lo que tienes guardado, pero que aun así no te deja hablar.
Que poco a poco te impide que seas valiente y digas lo que tienes que decir, que te deja sin voz, que te crea ese sentimiento de culpa...
Pero ese sentimiento solo desaparecerá si consigues perdonarte...
Cierra los ojos de una vez y no pienses, no dejes que el miedo te impida hacer lo que tantas ganas tienes de hacer.

HABLAR, GRITA, LLORA, RIE O PATALEA 

Haz lo que tengas que hacer de una vez, no pienses más.
Que el miedo no se apodere de ti, no permitas que te impida hacer lo que deseas.
Da ese paso hacia delante y enfréntate a todo, porque ya no tienes nada que perder.
Siempre cabe la posibilidad de que puedas ganar, no pienses  y salta.
Salta al vacío y lánzate contrato todo y por todo, libérate.
No te quedes esperando, no te sientes a ver como se pasan las cosas y tú poco a poco te consumes.
No te quedes ahí, levántate, plantare cara al miedo y LIBERATE.

Solo tú puedes acabar con tus miedos, porque eres tu quien los crea.

SI PUEDES CREARLOS, PUEDES GANARLOS.

@bi_twitera